1. Termogénicos
Los quemadores de grasa termogénicos son los más habituales, y también los más efectivos. Su funcionamiento es sencillo: contiene ingredientes que aumentan la temperatura corporal y aceleran el metabolismo (1).
Es decir, hacen que el cuerpo consuma calorías a mayor velocidad para generar energía (2).
Es por eso que, para que este tipo de quemadores de grasa den resultados es esencial combinarlos con ejercicio físico y una dieta adecuada.
2. Lipotrópicos
Los lipotrópicos son quemadores de grasa (naturales o artificiales) que influyen directamente en el funcionamiento del hígado.
Este órgano es el encargado de regular los niveles de azúcar en sangre, además de descomponer la grasa y transportar desechos generados durante la digestión.
Estos suplementos potencian su funcionamiento, de forma que consiga descomponer de forma eficaz las moléculas de grasa acumuladas en el hígado y en los tejidos corporales.
Este tipo de quemadores de grasa, sin embargo, pueden causar daños en el hígado, por lo que no suelen ser lo más recomendados (3).
3. Supresores del apetito
Los supresores del apetito no son, en realidad, quemadores de grasa como tal. Lo que sucede es que muchos quemadores de grasa naturales incluyen este efecto en sus fórmulas para potenciar sus efectos.
Pero lo cierto es que este tipo de suplementos no tienen como finalidad quemar grasa sino reduce la ingesta de alimentos. Para ello, “engaña” al sistema nervioso central (4) y aumenta la saciedad.
Básicamente, provocan la sensación de estar lleno, de forma que se reduzca la ingesta calórica. Esto, a la larga, puede producir una pérdida de peso. Sin embargo, no está exento del riesgo de sufrir efecto rebote.
4. Bloqueadores de carbohidratos
Los bloqueadores de carbohidratos son suplementos que contienen ingredientes que inhiben las enzimas encargadas de descomponer el almidón u otras fuentes de hidratos de carbono.
De esta manera, estos nutrientes no pueden absorberse ni digerirse, siendo eliminados de forma natural por el organismo.
A la larga, esta falta de carbohidratos obligará a nuestro organismo a usar las reservas de grasas para generar energía, provocando lo que se conoce como lipólisis (5).
5. Bloqueadores de grasas
Al igual que en el caso anterior, los bloqueadores de grasa son suplementos que contienen ingredientes (como el chitosan) que inhiben el funcionamiento de las enzimas encargadas de descomponer y absorber este nutriente.
También pueden ser, como en el caso del mencionado ingrediente (7), fibras capaces de unirse a las moléculas de grasa.
Al aumentar su tamaño, impiden su absorción natural, haciendo que se eliminen por medio de la excreción.
Así, se consigue reducir al acumulación de grasa. No es, por lo tanto, un quemador de grasa en sí, aunque su efecto a la larga sea el de reducir su aparición.
6. CLA
El CLA es un compuesto fabricado a partir de aceite natural de cártamo cuyos efectos han sido muy estudiados en los últimos años por su capacidad para ayudar a la pérdida de peso.
A la larga, esto puede provocar la lipólisis, haciendo que se queme la grasa acumulada.
Su efectividad y sus posibles efectos secundarios, sin embargo, han puesto a este suplemento en tela de juicio en más de una ocasión (8).
7. Diuréticos
Los diuréticos no son quemadores de grasa aunque su efecto pueda estar presente en algunas fórmulas naturales de este tipo de suplementos.
El efecto de estos complementos es reducir la retención de líquidos y eliminar el exceso de agua de forma natural por medio del sistema renal.
Esto provoca que el cuerpo se deshinche, acumule menos líquidos y genere una sensación de adelgazamiento que puede, incluso, verse reflejada en la báscula.
Sin embargo, estamos hablando de un efecto temporal. El efecto visual es de verse menos hinchada pero no más delgada.
Al momento de dejar de tomar el tratamiento, el cuerpo volverá a acumular líquidos (que son necesario para las funciones digestivas) de manera natural.
Consejos para saber qué tipo de quemador de grasa elegir
- Termogénicos: recomendados si tienes un metabolismo lento que te impide conseguir resultados aun haciendo ejercicio y llevando una dieta equilibrada. También te será útil si tienes un metabolismo rápido pero quieres potenciar la quema de grasa.
- Lipotrópico: recomendados si te cuesta bajar de peso y no puedes hacer ejercicio de forma habitual. Ten cuidado y consulta con tu médico antes de usar estos suplementos, pues pueden causar daños en el hígado.
- Bloqueadores de carbohidratos: recomendados si estás llevando una dieta cetogénica y quieres conseguir mejores resultados en menos tiempo. Ten en cuenta que el riesgo de efecto rebote es elevado.
- Toma bloqueadores de grasas: recomendados si no consigues adelgazar pese a cuidar de tu dieta o, de forma puntual, durante periodos en los que sepas que vas a comer más de lo natural. Ten en cuenta que puede provocar efecto rebote.
En cuanto a los supresores del apetito y los diuréticos, no son realmente quemadores de grasa. Sin embargo, son efectos adicionales que algunos productos de este tipo pueden tener, y pueden resultar beneficiosos. Así que no hay problema en utilizarlos.
En cuanto al CLA, aún falta investigación para saber si realmente es un suplemento aconsejable por lo que no podemos recomendar nada al respecto.
Preguntas frecuentes
El mejor tipo de quemador de grasa para empezar es el termogénico. Eso sí, debes usarlo siempre acompañado de ejercicio físico y una dieta equilibrada, de lo contrario los efectos serán mínimos.
De todos los tipos de quemadores de grasa, el más efectivo es el termogénico. Este tipo de suplementos aceleran el metabolismo y son los más seguros y los que mejor funcionan por regla general.
No, no todos los tipos de quemadores de grasa son igual de seguros. Todos tienen contraindicaciones generales, pero algunos tienen efectos secundarios más preocupantes, como los lipotrópicos o el CLA, que pueden hacer daño al hígado.